En Miriam Salón definimos al maquillaje con aerógrafo como una técnica que supone maquillar la piel o el cuerpo sin tocarla, donde el único vehículo que existe es el aire. Es lo que se conoce hoy en día como el maquillaje de “alta definición” y es que es una forma de perfeccionar al maquillaje tradicional.

Los aerógrafos se componen de un rociador o una manguera donde se le introduce el color o las diferentes bases de maquillaje y es donde sale el aire.

A diferencia de los maquillajes tradicionales que se suelen aplicar con brochas o pinceles, el aerógrafo, puede ser utilizado por distintas personas, pues no toca la piel y por tanto gana mucho en higiene. Algo muy valioso en esta pandemia y época de nueva normalidad.

Existen dos formas de maquillarse con aerógrafo, puede ser con base de silicona, que es muy aconsejable por los grandes resultados y otro para personas alérgica a este producto y es de base acuosa de alta fijación.

A parte de la base de maquillaje, también se pueden maquillar otras partes del rostro, como los párpados, las mejillas, los labios, etc.

El maquillaje con aerógrafo puede sonar bastante genial, tiene grandes ventajas pero también algunos inconvenientes, en Miriam te mencionamos las dos caras de la moneda para que decidas en qué ocasión es lo ideal.

Ventajas

• Acabado profesional
• Larga duración
• Resistente al agua
• Aspecto natural
• Piel con efecto airbrush (aterciopelada)
• Tapa cualquier impureza
• No mancha
• Higiene

Desventajas

• Mezcla de trazas de maquillaje en el aerógrafo
• Daños del instrumento
• Pocas tonalidades, por lo tanto es difícil saber cuál te queda a primera vista.
• Proceso tardado

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